Los grandes diseñadores ayudan a los equipos y partes interesadas a tomar mejores decisiones al usar preguntas para identificar oportunidades, revelar necesidades subyacentes y comprender el contexto del usuario
James Dyson, inspirado en una centrífuga utilizada para separar las partículas de pintura del aire, creó la primera aspiradora sin bolsa del mundo en 1983 después de haber pasado por 5,127 prototipos, el epítome del pensamiento de diseño. Seguramente, James debe haber hecho muchas preguntas en el camino…
Los diseñadores se enfrentan a problemas difíciles todos los días, problemas que requieren que encuentren soluciones de diseño que se ocupen de las limitaciones comerciales y técnicas, al tiempo que abordan las necesidades de los usuarios. Al mismo tiempo, la necesidad de encontrar soluciones rápidamente no debe impedir que los diseñadores comprendan a fondo el corazón del problema, así como el contexto del usuario, desde el principio.
La “fase de investigación” crítica no debe pasarse por alto: es un componente vital en el proceso de pensamiento de diseño. Es donde las preguntas cuidadosamente formuladas se revelan como una excelente manera de abordar un problema de diseño incluso antes de que los diseñadores comiencen a “diseñar”.
Las preguntas son una expresión genuina de nuestra curiosidad e interés en algo. Son los medios por los cuales las personas buscan significado en el mundo que los rodea y, a menudo, desencadenan nuestra voluntad de explorar.
Cuando los diseñadores se enfrentan a un problema su cerebro está programado para encontrar una solución lo suficientemente buena de inmediato y actuar en consecuencia. Sin embargo, es importante tener en cuenta que aquellos que estén dispuestos a entregar productos y servicios exitosos deben enfrentar los problemas y desarrollar una comprensión más profunda de ellos con el fin de obtener valiosos conocimientos.
Al saber cómo funcionan las preguntas y cómo usarlas inteligentemente, los diseñadores pueden desatar el potencial de buenas preguntas para desarrollar la comprensión, activar la imaginación y fomentar la colaboración.
Por què los diseñadores no hacen preguntas
Los diseñadores suelen operar en entornos de rápido movimiento que exigen centrarse en soluciones rápidas y entrega. En ese contexto, preguntas como “¿Por qué necesitamos resolver ese problema?” O “¿Cómo notaron este problema?” Lo cual puede conducir a una mejor comprensión de las causas y necesidades subyacentes, se ven como interrupciones que ralentizar el proceso.
Si bien las ganancias rápidas son aceptables en algunas situaciones, los diseñadores también tienen la responsabilidad de ayudar a los equipos a establecer una dirección y no desperdiciar recursos valiosos que funcionen, sin importar la rapidez, en los problemas incorrectos.
Los diseñadores son como detectives; necesitan información de muchas fuentes diferentes para resolver sus casos. ¿Y cuál es la habilidad clave que tienen los buenos detectives? Hacer preguntas inteligentes que los ayuden a aclarar el caso, resolver el rompecabezas y descubrir la verdad.
¿Por qué los diseñadores no hacen las preguntas con tanta frecuencia como deberían?
Algunos diseñadores le temen a las personas molestas. Cuando alguien presenta una nueva idea o solución al equipo, las preguntas que revelan debilidades o áreas descubiertas pueden hacer que los propietarios se sientan incómodos. Pensaron que lo tenían todo resuelto, y de repente, hay un elemento de incertidumbre introducido en la imagen.
Se dan cuenta de que hay más en qué pensar de lo que esperaban, por lo que ven al diseñador como una “molestia”. Los diseñadores deben dejar en claro que no están ahí para molestar a la gente o ralentizar el proceso innecesariamente, sino para ayudar al equipo a construir mejores productos; en consecuencia, su opinión debe verse como una contribución valiosa y una parte crucial de un proceso de diseño prudente.
Mucha gente piensa en diseñadores en un nivel de ejecución: las decisiones las toman los equipos de tecnología, negocios y marketing, mientras que los diseñadores simplemente ejecutan comandos. Pero los diseñadores también tienen la responsabilidad de exponer el valor del diseño a un nivel estratégico.
Algunos diseñadores carecen de la confianza y el entrenamiento tanto para hacer buenas preguntas como para hacerlo de una manera que claramente revela su voluntad de ayudar y colaborar. Como todo en la vida, hacer buenas preguntas es una cuestión de entrenamiento. Cuanto más lo hagas, mejor lo conseguirás. Uno de los propósitos de este artículo es proporcionar diseñadores algunas ideas que los ayudarán a comenzar en el arte de hacer buenas preguntas
Tipos de preguntas efectivas para diseñadores
Una buena pregunta es la que le permite obtener el tipo, calidad y cantidad de información que necesita. Para hacerlo, los diseñadores deben decidir tanto el tipo de preguntas que utilizan como el modo en que las formulan.
Estos son algunos tipos básicos pero muy efectivos:
Las preguntas abiertas animan a las personas a reflexionar y revelar lo que es importante para ellos. Permiten que las personas amplíen libremente lo que les resulta cómodo, en lugar de justificar sus pensamientos. Las preguntas abiertas tienden a explorar las posibilidades, los sentimientos y las razones por las cuales. Michael J. Marquardt, autor de Leading with questions, describe algunos tipos de preguntas abiertas:
- Las preguntas para aclarar ayudan a alinear y evitar malentendidos. Entonces, ¿quieres decir que …?
Las preguntas cerradas requieren respuestas específicas —por lo general sí o no— o fuerzan al encuestado a seleccionar una respuesta de un conjunto determinado, o para estar de acuerdo o en desacuerdo con un enunciado. Las preguntas cerradas tienden a enfocarse en los hechos — qué, cuándo, dónde — y generalmente son fáciles de responder. Por ejemplo: “¿Dónde naciste? ¿Cuántas millas conduces al mes?”
La anatomía de una buena pregunta
Una buena pregunta no depende solo del tipo de pregunta que es, sino también de cómo se formula. La formade una pregunta es parte de su función. Las buenas preguntas deben enmarcarse bajo estos principios:
Las buenas preguntas deberían empoderar. Las preguntas sobre la eliminación del poder se centran en por qué la persona no tuvo éxito, lo que pone a esa persona en un modo defensivo. Las preguntas de empoderamiento se hacen desde la confianza: logran que las personas piensen y encuentren sus propias respuestas, lo que transfiere la propiedad y desarrolla la autoresponsabilidad.
Por ejemplo, al dar su opinión, en lugar de simplemente decir “No creo que esto funcione”, podrías preguntar: “¿Qué otras opciones has explorado y por qué elegiste esta?”_
Las buenas preguntas deben desafiar las suposiciones. Deben ayudar a aclarar la situación y hacer que las personas, los equipos y las organizaciones exploren los métodos, procesos y convenciones que impulsan sus acciones.
Las buenas preguntas deberían hacer que la persona se acerque. Deben alentar la reflexión y ayudar a las personas a ir más allá de lo obvio. Las buenas preguntas motivan a las personas a llevar las cosas al próximo nivel. Por ejemplo, cuando se habla con equipos de tecnología, en lugar de preguntar: “¿Puedes hacer esto?”, podrías preguntar: “Suponiendo que este sea el camino a seguir, ¿qué necesitarías tener o eliminar para lograr esto?”
Las buenas preguntas deberían alentar el pensamiento innovador. Las buenas preguntas abren nuevas posibilidades. Involucran a las personas en procesos de pensamiento divergentes que conducen a nuevas perspectivas. Por ejemplo, al diseñar una nueva pantalla de inicio de sesión, en lugar de solo preguntar: “¿Cómo podríamos acelerar el proceso de inicio de sesión?”, Podrías preguntar: “¿Cómo podríamos ofrecer valor a nuestros usuarios sin tener que iniciar sesión?”
La configuración para buenas preguntas
Incluso si eliges el tipo correcto de pregunta y lo encuadras correctamente, necesitas establecer el escenario para que otros entiendan por qué está haciendo preguntas y para qué. Los diseñadores no son jueces, son facilitadores que proporcionan un contexto para que fluya la información como parte del marco de pensamiento de diseño y ayudan a todos a tomar decisiones informadas.
Aquí hay un proceso que ayuda a lograr eso:
Adopta una mentalidad de aprendizaje. Nuestra mentalidad enmarca la forma en que vemos el mundo. Un alumno es optimista y busca la comprensión como una forma de guiar sus acciones. Se curioso, atento y receptivo. No eres juez, eres un diseñador que necesita investigar el problema más profundamente para tomar decisiones, así que hazle saber a la gente.
Encuentra las personas adecuadas para preguntar. Conozca quién puede ayudarlo más y asegúrese de contar con ellos: adaptarse a su cronograma, buscar el mejor momento para incorporarlos e involucrarlos en tu proyecto.
Prepara el escenario. Calentamiento. Proporcione contexto y haga que las personas se sientan cómodas para que estén abiertas y listas.
Haz tus preguntas. A veces solo quiere que las personas expresen sus pensamientos sobre algo. Otras veces, deseas hacer preguntas específicas incluso si sabes que será desagradable para ellas. Si realmente necesitas respuestas, prepara el escenario adecuadamente y pregúntales de todos modos.
Profundiza más. Haz preguntas de seguimiento para obtener información más profunda y aclarar que todos entienden lo mismo. Use el poder del silencio — simplemente manténgase en silencio, mire a la gente a los ojos y asiente con la cabeza — para que puedan expandir sus pensamientos e ideas sin interrupción.
¿Cómo se pueden hacer buenas preguntas? ¿Comprender el entendimiento?
Las buenas preguntas desafían el status quo, obligando a las personas a prestar atención a lo que realmente está sucediendo. Ayudan a descubrir cómo funcionan las cosas, quién está involucrado y cómo se relaciona todo. Las preguntas ayudan a crear un mapa claro de la situación.
Encuentra la raíz del problema. Algunos diseñadores se enfocan en los síntomas y simplemente brindan soluciones para ellos. Los grandes diseñadores se centran en comprender el origen de esos síntomas para hacer un buen diagnóstico.
Supuestos del desafío. Individuos, equipos y organizaciones tienen sus propios hábitos y procesos. Las buenas preguntas ayudan a detectar sus prejuicios y a encontrar nuevas perspectivas y puntos de vista.
Comprender el contexto. Los diseñadores usan diferentes técnicas de mapeo para tener una idea clara de cómo funciona todo el sistema. Utilizan la etnografía y la empatía para comprender las conductas y los modelos mentales de las personas. Las buenas preguntas ayudan a obtener ideas valiosas y descubrir patrones sociales, económicos o culturales que tienen lugar en un contexto particular.
Técnicas de cuestionamiento que construyen un entendimiento más profundo
Los 5 porqués
5. Porque las personas compran nuestro producto como un regalo a alguien solo un par de días antes de la fecha de regalar. 10 días es demasiado tiempo para el envío.
En la pregunta cinco, los diseñadores de productos se acercaron más a la raíz del problema y arrojaron luz sobre nuevos enfoques para considerar que no eran necesariamente los originales, problema “asumido”. Para obtener una descripción más detallada sobre el Método de los 5 porqués, visita Mindtools.
Quién, Qué, Dónde, Cuándo, Por qué y Cómo
Este es otro marco que puede usarse para analizar y obtener una comprensión más profunda de la situación y el contexto. Cada vez que enfrenta un problema, hacer estas preguntas lo ayudará a tener una visión clara de la situación actual, a trazar puntos críticos de dolor y a encontrar posibles formas de tomar medidas concretas que resuelvan el problema:
- ¿Qué elementos componen la situación? Acciones, comportamientos, elementos, herramientas …
- ¿Dónde ocurre? Geográficamente, culturalmente, socialmente, económicamente …
- ¿Cuándo ocurre esto? Pasado, presente, futuro, contexto situacional (cuando tengo prisa), frecuencia …
- ¿Por qué pasó esto? Causas, limitaciones, necesidades, motivaciones …
- ¿Cuándo ocurre esto? Pasado, presente, futuro, contexto situacional (cuando tengo prisa), frecuencia …
- ¿Por qué pasó esto? Causas, limitaciones, necesidades, motivaciones …
- ¿Cómo se creó la situación? Procesos, métricas, resultados …
¿Cómo pueden los diseñadores desencadenar la imaginación haciendo grandes preguntas?
Las grandes preguntas tienen el poder de transportarnos a escenarios inimaginables y transformar la forma en que vemos la realidad. Preguntas como, “¿Cómo sería esto en 2050?” Nos llevan a una mentalidad en la que nuestras restricciones y sesgos actuales ya no son válidos, lo que nos obliga a operar bajo nuevos paradigmas.
Cuando replanteamos una situación con preguntas como, “¿Qué pasaría si todos los humanos estuviéramos ciegos?” Estamos desafiando el conjunto de creencias y valores que usamos al inferir significado, entonces nuestra visión de la situación puede cambiar dramáticamente. Cuando las personas ven las cosas desde nuevas perspectivas, ocurre innovación.
Técnicas de cuestionamiento que pueden desencadenar la imaginación
Hay algunos iniciadores de preguntas que te ayudarán a enmarcar tus preguntas de una manera que fomente la imaginación y haga que las personas desarrollen nuevas perspectivas:
- ¿Qué pasaría si…?
- ¿Cómo sería diferente si …?
- Suponer que…
- ¿Y si supiéramos …?
- ¿De qué otra manera podríamos …?
¿Cómo pueden los diseñadores fomentar la colaboración haciendo grandes preguntas?
Las preguntas también son una buena manera de ayudar a los compañeros de equipo a identificar puntos críticos en sus diseños y encontrar argumentos más sólidos para sus decisiones. A través de * comentarios** inteligentes y constructivos, todo el equipo puede beneficiarse del punto de vista de todos y del área de especialización.
En lugar de preguntar “¿No es esa interacción un poco incómoda?” Lo que podría poner a la gente a la defensiva, los grandes diseñadores hacen preguntas como, “¿Qué otras opciones consideró y por qué eligió esta?” Ayudará a las personas a reflexionar sobre su trabajo, a explicar los motivos y a ver las preguntas como un regalo.
Las preguntas crean respeto y muestran interés en los sentimientos y pensamientos de los demás. Ayudan a alinear a los miembros del equipo, aclarar objetivos y dar a las personas un sentido de responsabilidad y pertenencia.
Las preguntas también mejoran la autoconciencia y desarrollan una mejor escucha y una mayor capacidad de comprensión. Cuando haces preguntas a tus compañeros de equipo, aprendes cómo piensan, en qué creen, cómo se sienten en ciertas situaciones, etc. Ayuda a crear vínculos sólidos con el equipo.
Técnicas de cuestionamiento que fomentan la colaboración
Como parte de un ejercicio de pensamiento de diseño, hay algunos iniciadores de preguntas que ayudarán a enmarcar las preguntas de una manera que fomente la confianza y aliente la colaboración del equipo:
- ¿Cómo te sientes acerca de…?
- ¿Cómo describirías…?
- ¿Cómo podríamos …?
- ¿Qué ayuda necesitamos para …?
El proceso de pensamiento de diseño usando grandes preguntas
El cuestionamiento es una herramienta poderosa que todo diseñador debe poder usar con fluidez. Como parte de un proceso de pensamiento de diseño, las preguntas pueden ayudar a comprender una situación y obtener información valiosa. También pueden fomentar la creatividad y la innovación dentro de una organización, y pueden ayudar a los equipos a alinearse y unirse.
Hacer preguntas y dejar que fluya la información es esencial para el crecimiento como individuo y como organización. Pero una cultura cuestionadora también requiere una atmósfera de confianza y responsabilidad, donde se respeten y promuevan la sabiduría y las capacidades de todos.
Como diseñador, haz preguntas y asegúrate de que todos entiendan que provienen de una curiosidad genuina y un deseo de explorar el diseño de productos más profundamente con el objetivo de encontrar la mejor solución de diseño.
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